¿Se te puede quitar el hipo si te asustan?, esto dice la ciencia

¿Quién no ha experimentado alguna vez ese molesto y persistente hipo que parece no querer irse? La sensación incómoda de tener el diafragma jugando al ritmo equivocado puede ser bastante irritante, y aunque en la mayoría de los casos se trata de algo temporal, a veces se convierte en un invitado no deseado que se queda demasiado tiempo. Pero ¡tranquilos!, aquí te presentamos trucos caseros que realmente funcionan para despedirte del hipo de una vez por todas.

El hipo puede aparecer por diversas razones, desde el consumo de bebidas burbujeantes hasta situaciones de estrés emocional. Incluso ciertos medicamentos pueden desencadenar episodios de hipo. Aunque en la mayoría de los casos es temporal y se resuelve por sí solo, hay momentos excepcionales en los que persiste, indicando posiblemente un problema médico subyacente que requiere atención profesional.

Para combatir eficazmente el hipo, es esencial entender cómo funciona nuestro diafragma, el culpable detrás de estos movimientos involuntarios.

Aquí van algunos trucos caseros que han demostrado ser efectivos

1. Control de la respiración: Practicar respiraciones lentas y profundas ayuda a restablecer el ritmo normal del diafragma. Inhala y exhala con calma.
2. Retener la respiración: Inhalar profundamente y mantener el aire por unos segundos antes de exhalar lentamente puede calmar el hipo.
3. Uso de bolsa de papel: Inhalar y exhalar dentro de una bolsa de papel puede ayudar a regular la respiración, asegurándote de utilizar papel en lugar de plástico.
4. Postura fetal: Acostarse y llevar las rodillas hacia el pecho durante unos minutos alivia el hipo de manera efectiva.
5. Inclinación hacia adelante: Inclinarse o agacharse para comprimir el diafragma puede contribuir a detener el hipo.
6. Maniobra de Valsalva: Exhalar mientras se aprieta la nariz y se mantiene la boca cerrada ayuda a restablecer el ritmo del diafragma.
7. Puntos de presión: Tirar de la lengua, presionar el área justo debajo del esternón o aplicar presión en la palma de la mano son técnicas que pueden ayudar a detener el hipo.
8. Masaje en las arterias carótidas: Girar la cabeza hacia la izquierda y masajear la arteria carótida derecha con movimientos circulares durante unos segundos puede ser útil.

Desarmando mitos populares

Además de estos métodos, existen varios mitos populares para poner fin al hipo, como beber agua al revés, dar un susto a la persona afectada o beber un vaso de agua con una cuchara en la boca. Aunque estos métodos son conocidos, es importante destacar que carecen de evidencia empírica sólida. Beber agua al revés, por ejemplo, puede ser más un desafío que una solución efectiva, y asustar a alguien podría resultar en risas en lugar de la eliminación del molesto hipo.

La idea de que el hipo puede quitarse asustándote es un mito popular. Aunque es cierto que algunas personas recurren a este método, no hay evidencia científica sólida que respalde su eficacia de manera consistente. El hipo es causado por contracciones involuntarias e intermitentes del diafragma, y aunque el susto puede provocar una reacción momentánea, no proporciona una solución garantizada para todas las personas.

La próxima vez que sientas que el hipo amenaza con arruinar tu día, ¡inténtalo! Controla tu respiración, adopta posturas específicas, y desecha los mitos que, aunque populares, no están respaldados por la ciencia. ¡Despídete del hipo y vuelve a la normalidad con estos simples y efectivos trucos caseros!

Fuente: ensedeciencia.com